La historia de Frodis es muy especial.
Concordia, presidenta de esta Asociación, la encontró atada en el cauce de un río seco. Estaba desnutrida y uno de sus cascos era, aproximadamente, tres veces más grande que los demás. Concordia comunicó que el rescate de esta yegua era urgente.
Al resto del Equipo de nuestra Protectora le resultó muy extraña la urgencia con la que Concordia quería recoger a la yegua (ya que en otras ocasiones se han rescatado animales con lesiones y enfermedades aún más graves), pero, ante la duda, se tomaron todas las medidas oportunas para rescatarla cuanto antes.
Concordia insistía: “Si en cinco días no está en el refugio, morirá”. Tardamos dos días en conseguir los permisos para recogerla. La veterinaria la visitó en cuanto llegó a nuestro centro, confirmando su desnutrición, pero descartando otra patología de gravedad.
Tres días más tarde nacía Betsy. ¡La yegua estaba tan delgada que ni siquiera se apreciaba su avanzado estado de gestación! Probablemente, ambas hubieran muerto durante el parto.
Betsy nació totalmente desnutrida y con una grave lesión en la espalda. Con el tiempo, hemos descubierto que algunos propietarios, cuando ya no están interesados en sus animales y no quieren seguir invirtiendo dinero en ellos, los atan en los lechos de los ríos para que mueran…
En los meses de septiembre y octubre comienzan las primeras lluvias y se producen las crecidas, en ese momento los animales permanecen atados y se ahogan. Sabemos que es difícil de creer, pero tenemos las pruebas que documentan todos los casos con los que nos hemos encontrado a lo largo de los años.
Apadrina a Frodis, para ayudarnos a evitar que estas tragedias silenciosas (que la mayor parte de nuestra sociedad aún desconoce) sigan ocurriendo.